Él

Sofía Maiza 4º "A"

    "No hay futuro sin un pasado alguno"... ¿No? Y a él, ya lo puse en el pasado, no sirve tenerlo en el presente, mucho menos buscarlo en un futuro. Sé que "las personas frías demuestran sus sentimientos cuando son verdaderos", pero él nunca me demostró nada. “Soy una persona fría y lo sabés”, decía...

    La gota que rebalsó el vaso fue cuando me dijo algo como: “No sos inservible, servís de mal ejemplo”, tratándome mal, despreciándome todo el tiempo. Ni un segundo se paraba a pensar en todo lo que yo sentía por él, o todo lo que hacía.   Parecía no importarle nada.

    Todo el mundo sabe que "la vida es una sola y hay que disfrutarla", pero yo en ese momento no la estaba disfrutando.  ¿Lo peor de todo? Lo sabía.  Y llorando, entre pañuelos húmedos, recordé cuando me escribía a través de una pantalla que no transmitía absolutamente nada; “Tu sonrisa tan resplandeciente a mi corazón deja encantado”. Pero yo ya no le creía nada a ese imbécil. ¡Qué más da! ¡No voy a seguir remando océanos de dulce de leche con una cuchara! ¡No voy a seguir perdiendo el tiempo en algo que no me sirve! Algo falso, algo que al fin y al cabo es un capricho enorme al cual me aferré por falta de bienestar propio.

    Y a vos, que me escuchás hablar, te digo: "¡Ojalá nunca te abracen por última vez, hay tantos con quienes estar y pocos con quien ser!"  Con esa persona, yo no podía ser. Era constante el sufrimiento de no saber que le pasaba, de no tener su apoyo. Siempre con una actitud repugnante y soberbia al decir y pensar que; "Podrán imitarnos, igualarnos jamás. Mostraba actitud intolerable.

    "El tiempo es relativo", pero todo el tiempo que desperdicié con esa persona fue inhumano. Increíble no haber abierto los ojos antes y ver lo que tenía a mi lado.

     Y aunque me duela, sé y estoy segura que "del mismo dolor, vendrá un nuevo amanecer". Enfocarme en mí, "vivir la vida a pleno, pasar desafíos y disfrutar del cambio, eso es vivir", no lo que yo pasé y lo que vos estás viviendo y lo sabés, porque lo sabés y no lo querés afrontar....

      Si tengo que detallar mi situación actual, muy en el fondo te diría que "la paz en mí, nunca la encontrarás", porque paso un tornado de altibajos constante que lo único que me hacen es pensar en él y en lo que pasamos, aunque haya sido un desperdicio, sí, duele.

    “Lucha por tus sueños” decía el desastroso, el intolerante; era lo único que sabía decir.

    Y para ir concluyendo esta serie de frases de arrepentimiento y odio, me di cuenta  que estaba metida en un ambiente tóxico, que no me traía ningún tipo de bienestar, pero ya no se puede hacer nada, al fin y al cabo "será la vida que siempre nos pega un poco". Además, "aunque me caiga y me lastime, seguiré corriendo hacia mis sueños".

     Siempre salí adelante sola, no necesité la ayuda de nadie.   ¿Por qué necesitarla ahora?

     Antes yo pensaba en la frase que dice:  “Creo en el no arrepentirse, creo en dejar las cosas fluir, yo creo que todo pasa por algo” y por más que ahora esté arrepentida, sigo firme en que todo pasa por algo. Por más que el tiempo en el que él haya estado en mi vida, no me haya servido de nada, tal vez haya sido una pequeña señal para darme cuenta de lo que se viene.

     "Cumple sus sueños quien resiste"; él, nunca hizo nada para ayudarme a resistir, por lo cual aprendí a resistir sola.

     Aunque nadie me tenía confianza ya que era un poco torpe, luché por mis sueños, como dijo mi abuelo, y acá estoy, a una semana de jugar la final del mundo, "por eso creo en el no arrepentirse, creo en dejar las cosas fluir. Yo creo que todo pasa por algo".