Aprender de la vida

Ailén Martinez Dodds 4º "B"

    Muchos me dirán: "Que ningún ayer te queme la cabeza"   pero me es imposible si lo que pasó fue muy doloroso para mí.

    "Dicen que uno siempre vuelve a los lugares donde fue feliz" pero no es mi caso.   Tal vez en el lugar en el que fui más feliz también pasé mis peores momentos.   Años atrás, lo que sucedió puede catalogarse de  dos maneras  "el paraíso o la tortura".  Paraíso; porque me di cuenta a tiempo de la clase de persona que tenía enfrente y tortura al ver la falsedad con la que me trataba.   Pero no lo dije, quería que se diera cuenta que yo sabía.   Todo ese tiempo le tuve paciencia, pero no lo hizo.            

     "Todo vuelve",  no me canso de repetir esto en mi mente cientos de veces.

Tuve demasiados tropiezos, llenos de dolor y de angustia.   Pero este hecho es uno de los que no se compara con nada.

    "No sé qué seremos ahora, si cercanos o extraños" (pienso).  Para mí, extraños con la confianza depositada en aquella persona, rota.

    "Siempre es bueno ponerse en los zapatos de los demás" para entender el porqué de sus actos. Y lo hice, pero no valió la pena.

     En esos tiempos, "la música era mi amiga"; mi compañera durante los peores momentos.

Y entonces me di cuenta que "la vida es un juego", que hay que aprender a jugar para no volver a caer.