
Un encuentro con el pasado
Había una vez un chico sentado en un árbol, que al cabo de un buen rato escuchó un ruido horroroso. Éste, provenía desde un lugar oscuro y tenebroso, por lo tanto y a pesar de la incertidumbre y la curiosidad que lo mataba, decidió ir a ver qué era.
Con pasos silenciosos, se acercó, pero sus piernas lo traicionaron. Por todo el campo resonó el sonido de sus rodillas contra el piso. De pronto empezó a escucharse el sonido más y más cerca… El chico se dio vuelta y vio que no era. Nada más que un simple cascabel. Al levantarlo, le sobrevino un vago recuerdo de aquella noche de varios años atrás, cuando caminaba hacia su casa. Eran cerca de las 8 de la noche, hacía frio, era pleno otoño. Se había encontrado un cascabel que era un regalo nada más ni nada menos que de sus abuelos, los cuales se lo habían obsequiado cuando él era pequeño.


