Callejeando la fe
Por motivo del centésimo vigésimo cuarto aniversario (124) de la Congregación Hijas de Nuestra Señora de Luján, los misioneros de María Luján Sierra coordinaron esfuerzos para festejar durante toda la semana en Marcos Paz la celebración. Alumnos de la Escuelas Nuestra Señora de Luján de La Plata y Tres Arroyos, como así también los grupos juveniles y pastorales de diferentes parroquias como la de Nuestra Señora de Luján del barrio Rayito de Sol de Marcos Paz, se reunieron para callejear la fe.
Las actividades consistieron en visitar los distintos barrios del pueblo anunciando el evangelio. Todo el tiempo que duraron los festejos y la misión, los jóvenes conjuntamente con la participación de los padres Juan y Lucas conversaron con los vecinos, escucharon sus necesidades, rezaron por ellos, pero además mucha gente comenzó Catequesis. Otros pidieron ser bautizados y muchos otros tomaron la Comunión.
Las actividades se desarrollaron sin ningún tipo de contratiempo. Por otro lado también se llevaron a cabo diferentes juegos para toda la familia en los distintos barrios.
Durante la semana los invitados de las diferentes escuelas y parroquias fueron acogidos por el Grupo Misionero de la Escuela y para ello se contó con la donación de todos los alimentos, no solo por parte del instituto, sino también por los comercios del pueblo y otras instituciones.
El día miércoles se llevó a cabo la misa por los enfermos. La expectativa se concentraba en esta misa ya que un gran número de personas se concentraron para orar por la salud de sus enfermos.
El gran cierre de las actividades con la participación de la banda musical Filocalia, tuvo lugar el día jueves con un gran grupo de jóvenes.
El saldo fue muy positivo. Personas que formaron parte de tal evento manifestaron no poder estar más felices por lo vivido en la pasa última semana. La experiencia ha demostrado otra vez que hacer el bien sin mirar a quién es lo que llena el alma. Sin dudas ésta ha sido una semana que dejó a todos los que participaron en ella, satisfechos, felices, y con la convicción de seguir siguiendo a Jesús.